Este pequeño embalse de riego construido cerca del Monasterio de La Santa Espina, modificó el paisaje y se transformó en un humedal que atrae y acoge a distintas especies acuáticas protegidas.
Aves y anfibios han instalado su hogar en este embalse, incluido dentro del Catálogo de Zonas Húmedas de Interés Especial. Ubicado en el término municipal de Castromonte, el motivo principal que suscitó el interés fue una importante población de aves nidificantes; para lograr su protección, se trata de que nada ni nadie provoque efectos indeseados sobre ellas ni sobre este bello paraje.
El pequeño municipio de Castromonte, a unos de 30 Km. de Valladolid, se encuentra en la ruta turística de los Montes Torozos, y además de este embalse alberga otros importantes acuíferos que lo convierten en un lugar muy buscado para las actividades relacionadas con la naturaleza, la caza y la pesca.
Un recorrido por el pueblo nos permitirá observar varias casas que se diferencian por tener los escudos heráldicos en las fachadas; la arquitectura religiosa se expresa en la Iglesia de la Purísima Concepción, construida en piedra en el siglo XVI, y dos ermitas más modernas, una de ellas del siglo XVIII, y la otra es un edificio actual.
Si llegamos a Castromonte en agosto podremos participar de una de sus fiestas populares, en honor a la Vigen de Agosto, y en noviembre las fiestas patronales en homenaje a San Clemente.
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